
Los tratamientos superficiales son procesos de fabricación que se emplean para dotar de ciertas características a la superficie de una pieza u objeto. Dependiendo de los objetivos que se quieran cumplir con ese objeto se pueden conseguir ciertos cambios significativos que por sí sólo no puede cumplir.
En un principio se trataba de un proceso que sólo comprendía el tratamiento superficial para cambiar la apariencia estética del objeto y hacerlo mucho más atractivo a la vista. Sin embargo, con el paso del tiempo, se han ido cambiando esos propósitos manteniendo, en algunos casos, la premisa inicial.
Si queremos poner algunos ejemplos de los objetivos que se buscan con los tratamientos superficiales podemos citar los siguientes:
- Estética. Para hacer mucho más atractivo el objeto y provocar un impacto visual en el usuario.
- Liberar o introducir esfuerzos mecánicos que puedan afectar el desarrollo de las funciones de la pieza u objeto.
- Eliminar fisuras y aumentar la resistencia.
- Limpiar y esterilizar la superficie de contaminantes, suciedad o bacterias.
- Proteger contra la corrosión y las inclemencias del tiempo.
- Aportar características al tacto (rugosidad, suavidad, etc.)
Existen muchos procesos de tratamientos superficiales actualmente, como el galvanizado. Sin embargo, en ICSA Industrial también realizamos pintados y lacados como el último paso en la cadena de fabricación de piezas, objetos y cualquier producto. La apariencia final también es muy importante y eso es lo que nosotros ofrecemos en este tratamiento.
Garantizamos una calidad excelente mediante un precio competitivo para poder llegar a cumplir con sus expectativas y dar un servicio óptimo, que es lo que nos caracteriza.
Si necesita cualquier información adicional sobre nuestros servicios de tratamiento de superficies o sobre otros trabajos, puede ponerse en contacto con nosotros sin problemas. Le atenderemos encantados.